Este proyecto nace con la misión de capturar la esencia de un nuevo festival de música en las Islas Canarias, un evento que fusiona el ritmo, la energía y la identidad única del archipiélago. La creación de su identidad visual parte de una idea clave: conectar la música con el entorno natural canario.

El diseño del logo se inspira en la relación entre la nota musical "la" y el nombre del festival, integrando elementos característicos de las islas. Las líneas onduladas evocan el movimiento del mar, mientras que un triángulo representa la imponente silueta del Teide. Esta combinación refuerza la conexión entre la música, el paisaje y la cultura local. Además, la tipografía se construye a partir de formas triangulares, manteniendo la coherencia visual y aportando dinamismo.

Para acompañar la identidad, se ha elegido un color anaranjado intenso, símbolo de entusiasmo, energía y pasión. Este tono evoca tanto el ardor de la música en vivo como los vibrantes amaneceres que marcan el final de una noche de celebración. Con este diseño, el festival no solo se presenta como un evento musical, sino como una experiencia inmersiva que invita a sentir la magia de Canarias a través de la música y el arte.